Especificaciones y modalidades certificadas por Cambridge de manera oficial para los estudiantes de la lengua.
16 enero 2017
La aspiración vocacional o profesional con los idiomas debe de ser cuidada al máximo si se le quiere sacar el máximo provecho. Dichos cuidados, deben ser interpuestos tanto por la propia persona o estudiante en sí mismo, como por parte de la institución o centro al que acuda: ya sean clases particulares, centros de enseñanza obligatoria, o inclusive durante el estudio de una carrera que poco o nada tiene que ver con dicho aprendizaje, ya que también se impone dicha vertiente educativa. Y es que, pese a lo insistente de la sociedad y nuestra propia cultura con respecto al aprendizaje de un idioma extranjero como bien puede ser el inglés, no es hasta que comenzamos su estudio por parte de una institución certificada que muchas personas no ven su verdadera importancia, ya que un idioma tan popular y mundialmente utilizado te permitirá viajar, y sobre todo comunicarte y entender a personas de otros países, pudiendo así asimilar aún mejor su cultura, haciendo de ello una experiencia enriquecedora.
Gracias a la imposición global del sistema educativo, muchas personas han adquirido conocimientos importantes con respecto a las lenguas extranjeras, y han podido experimentar pos sí mismos la importancia de estudiar inglés de cara a un futuro donde se le podrá dar un uso profesional (enfocado al mercado laboral) y personal (uso y disfrute recurrente del mismo).
Evidentemente, para poder optar a alguna de estas dos modalidades (sobre todo la que afecta al panorama profesional) se debe de estudiar inglés de una forma mucho más dedicada: sobrepasando niveles de prueba específicos que te otorgarán los conocimientos oficiales suficientes como para certificar tu nivel de inglés, ya sea bajo, medio u alto. Desde Cambridge Assessment se preparan y forman estudiantes de todo tipo y nivel, en pos de una mejoría en el idioma.
Normalmente, el primer certificado al cual se someten los estudiantes y del que se hace entrega tras superar la prueba KET de Cambridge es aquel correspondiente a un nivel A2 de inglés. Esta prueba, considerada de nivel bajo, consta de cuatro partes que deberán ser aprobadas:
1.) Expresión escrita: La persona que se examina debe de realizar una redacción (en inglés, evidentemente) donde se le pone a prueba sus capacidades escritas del idioma, así como de expresión, la gramática y el vocabulario.
2.) Expresión oral: Normalmente, suele hacerse de forma grupal (por parejas) o interactuando con el propio profesor de la prueba. Esta parte del examen se centrará en la comunicación verbal y oral, por lo que para superarla se evaluará la expresión del estudiante, y su capacidad de comunicarse de forma oral y no escrita con otra persona en el idioma. La fluidez y la pronunciación son los dos pilares base sobre los que se sostiene el aprobado de dicha prueba.
3,) Comprensión escrita: En este apartado se analiza la capacidad de entendimiento y lectura del estudiante de inglés, otorgándole un texto con vocabulario y expresiones correspondientes a un nivel A2 de inglés, que este deberá de comprender a la perfección para posteriormente saber responder algunas cuestiones del mismo de forma efectiva.
4.) Comprensión oral: Mediante una grabación que simule una conversación habitual entre dos o más personas en el ámbito social (por ejemplo, en mitad de la calle) los estudiantes deberán de reconocer en todo momento sobre qué se está hablando, y diferenciar entre el típico ruido que puede ser habitual en una conversación de este tipo (coches pasando, otras personas hablando, etc.) para o bien rellenar partes del diálogo principal, o responder preguntas al respecto.
La prueba KET de Cambridge mencionada no es la única, ya que existen distintos niveles, que irán aumentando la dificultad de los exámenes en base a los conocimientos adquiridos por los estudiantes, y siempre dentro de un entorno grupal evaluado por los expertos en dicha universidad, quienes han impuesto de manera oficial en un gran número de instituciones su modelo educacional a la hora de aprender una lengua extranjera, teniendo el C2 como nivel máximo de un idioma.