Los desahucios exprés están a la orden del día, ya sea por impago de alquiler, de hipoteca o de suministros, pero también para hacer frente a la ocupación de viviendas y cada uno de los procesos tiene su tiempo.
06 noviembre 2017
La realidad inmobiliaria plantea escenarios muy distintos y es compleja en sí misma y es por ello que se precisan soluciones para cada tipo de situaciones, siendo la del desahucio exprés o rápido, una de las que demandan los arrendatarios que no siempre pueden echar a sus inquilinos en situaciones de impago.
Se puede dar el caso de que un propietario de piso cuente con uno o dos en alquiler, fruto de sus ahorros, cuyo importe necesita para vivir, y tenga inquilinos que no se lo paguen. No habrá más remedio que plantearse un desahucio exprés, el procedimiento mediante el cual los arrendatarios piden ayuda al Poder Judicial para que se desaloje a la persona que ocupa su inmueble sin cumplir sus obligaciones o sin el consentimiento del arrendador.
Cuando se aplica la ley del desahucio express y bajo qué circunstancias
El el año 1994 se dió una mejora legislativa en este sentido y desde entonces se le denomina express, pero para conocerlo a fondo hay que consultar información más detallada.
Entre los motivos más frecuentes para aplicar un desahucio express están el impago de las rentas del alquiler o el de los suministros que le correspondan al inquilino, o la ocupación de terceros y sin contrato de un piso o vivienda, ya se trate de con o sin consentimiento del dueño.
Antes de iniciar el proceso de desahucio se debe de mandar, por escrito, un requerimiento fehaciente al inquilino instándole a abonar los impagos sopena de iniciar un proceso judicial en un plazo de tiempo descrito. La mayor parte de las veces basta con este procedimiento y no se recurre a la vía judicial, pero si se da el caso de que no es así se deberá iniciar el proceso, se deberá esperar a que sea admitida la demanda y se pondrá fecha para la vista.
Durante este tiempo el arrendatario no podrá entrar en el domicilio que ocupa el inquilino, ni cambiar la cerradura, ya que jurídicamente el piso es del inquilino y este le puede denunciar por amenazas o coacciones.
El coste de estos procesos varían en función de los profesionales con los que se cuente para llevarlos a cabo y un desahucio de alquiler se calcula que está entorno a los 700 euros, excluyendo impuestos, y es en este precio que lo valoran los abogados según su Colegio profesional.
Un deshaucio exprés es 4 mesos más rápido que un desahucio convencional
En la actualidad se calcula que el tiempo estimado de un deshaucio exprés está entorno a los 6 meses, mientras que un juicio por desahucio de normal duración está entorno a los 10 meses si el inquilino no abandona voluntariamente el inmueble. Por lo que se refiere a los desahucios por impago de hipoteca el tiempo está entorno a los 18 meses.
Todos estos procesos, engorrosos en sí mismos, evidencian la compleja realidad inmobiliaria a la que nos referíamos y para llevarlos a buen término, nada mejor que contar con profesionales en los que delegar con total confianza.