vicente ferrer
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Los distintos beneficios medicinales de las raíces de la marihuana

Existen diversos remedios naturales que usamos como tratamiento de diversos problemas del organismo como la migraña, dolores de cabeza, musculares etc. De todas las plantas que usamos para tratarlos, es la raíz de marihuana.

10 noviembre 2017

El uso de la marihuana para tratar los problemas que hemos mencionado anteriormente se remonta a tiempos muy antiguos, pudiendo considerarse como un método ancestral que ha sido usado por diversas culturas desde hace miles de años.

El uso de la raíz de marihuana en la medicina


Son muchos los usos que se le da al cannabis medicinal. Uno de estos ejemplos es su uso para evitar náuseas, la inapetencia y los vómitos que se producen tras sesiones de quimioterapia, además de evitar dolor y espasticidad muscular para personas con VIH. LLevado a situaciones más leves, muchas personas con el trastorno de déficit de atención usan estas raíces para tratar este trastorno.


Además, la Universidad de Colorado demostró la eficacia de las mismas ya que reducen el problema de la migraña hasta en un 85% la frecuencia con la que se producen.


En España actualmente la legalidad de la misma está bajo revisión, sin embargo existen  muchos métodos legales para hacerse con estas raíces para su uso fármaco, no comprando la planta en sí sino teniendo que comprar semillas de marihuana.


Adquisición de las semillas de marihuana


Son varios los lugares donde obtener la raíz de marihuana. De entre todas las conocidas growshop, encontramos el banco de semillas de marihuana Kannabia. Aquí, podremos encontrar todo tipo de semillas con sus distintos efectos para tratar efectivamente los distintos malestares que se presenten.


Por ejemplo, las semillas de marihuana feminizadas Kannabia son semillas especiales que  se obtienen solo mediante la inhibición de una fitohormona y sin la necesidad de hacer modificaciones genéticas. Esta planta resulta especialmente útil para clasificar el cultivo en machos y hembras, ahorrando esfuerzo, espacio y tiempo de cultivo debido al ahorro del tiempo de clasificación. Estas plantas pueden ser cultivadas tanto en interior, como exterior y a un precio muy económico.


Otro ejemplo de semillas especiales son las semillas de marihuana autoflorecientes Kannabia. Son plantas de marihuana autofloreciente que inician su floración a una edad determinada independientemente de las horas de luz que los ejemplares reciban, por lo que pueden ser cosechadas en función de la programación del cultivador. El cruce de esta planta de manera selectiva con Ruderalis permite fijar éste carácter, por lo que estas variedades permiten cosechar en la fecha que más convenga al cosechador.

Por supuesto también encontramos las semillas de marihuana regulares, que es de donde provienen todos los cruces que podemos encontrar actualmente en el mercado. Las líneas genéticas principales se conservan gracias a la fecundación tradicional de una planta macho sobre otra femenina, técnica con la cual se garantiza la transferencia de la información hereditaria de forma natural.


Además, las semillas de marihuana de CBD son las más indicadas para el uso terapéutico, ya que su descubrimiento trajo consigo un aluvión de aplicaciones terapéuticas para las que podría ser recomendado, dando gran importancia a la proporción de este cannabinoide en la resina de la planta. Todo esto promueve el surgimiento de las semillas CBD alto, en las que la proporción de esta sustancia es mayor que la de THC, introduciendo posibilidades en el campo terapéutico.


Puntos a tener en cuenta para el cultivo de la marihuana


El cultivo de la marihuana está dividido por cuatro etapas: la germinación, la fase de crecimiento, fase de floración y cosecha.


Es importante que la planta esté en un lugar seco y una temperatura ideal que ronde los 8 grados centígrados. Por último, también es importante localizarla en lugar donde no reciba directamente los rayos del sol, ya que esto puede hacer que el ratio de germinación de la semilla no sea el deseado.


Además, la diferencia de cultivar en interior y exterior es muy relevante, pues al circular libremente el aire en exteriores no hará falta tener tantos factores en cuenta. En el interior, las plantas pueden absorber muchísimo CO² en pocos minutos, por lo que es necesario tener el recinto bien ventilado.